Ñoquis de espinaca y ricota

Riquísimos ñoquis sin harina

Con espinaca y ricota, podés preparar una receta simple y rápida, creando una versión muy saludable e incorporando todas las propiedades nutricionales necesarias.

Los ñoquis son una comida tradicional italiana cuyo nombre proviene de la palabra “gnocchi” que significa “bollo” o “grumo”, para los habitantes del país famoso por sus pastas. Para evitar utilizar harinas blancas, hoy te dejamos una deliciosa receta con salvado de avena, un alimento natural que colabora en:
1. Reducir el colesterol
2. Aumentar la sensación de saciedad en el estómago
3. Posee una gran cantidad de minerales y vitaminas
4. Presenta una composición nutricional equilibrada
Por su parte, la espinaca compuesta en su mayoría por agua y reducido nivel de hidratos de carbono y grasas, aporta:
1. Alto contenido de fibra
2. Cantidades elevadas de vitamina A, C y E
3. Son antioxidantes
4. Ricas en calcio, hierro, magnesio, potasio, sodio, fósforo y yodo.
A continuación, te presentamos un delicioso plato super sano para que puedas compartir con tu familia, pareja o amigos.

Ingredientes (para dos personas)

2 claras de huevo
250 gramos de ricota magra
1 taza de espinaca cocida y escurrida (cocinadas al vapor para mantener intactas todas sus propiedades)
2 cucharadas colmadas de salvado de avena (también se puede reemplazar por harina de arroz, para personas celíacas)
4 cucharadas de leche en polvo
Condimentos a gusto (sal, pimienta, nuez moscada y pimentón)
Para acompañar: salsa de tomate o rúcula, con una cucharada sopera de queso parmesano en hebras.

Preparación

1. En un recipiente, mezclar la ricota con los huevos, la espinaca y la leche en polvo. Procesar todo hasta que se forme una mezcla homogénea.
2. Añadir el salvado de avena y condimentar a gusto con las especias seleccionadas.
3. Formar una masa alargada y fina para cortar con ayuda de un cuchillo, en tiras. Luego, armar cuadrados más pequeños y darle formato con un tenedor.
4. Colocar los ñoquis en una placa enharinada y llevarlos a la heladera por un par de horas hasta que se endurezcan.
5. Una vez que la consistencia de la masa está a punto, cocinarlos en una olla con agua hirviendo durante 1 minuto, con mucho cuidado para que no se desarmen.
6. Servir con salsa de tomates frescos o con hojas de rúcula y, espolvorear con abundante queso rallado por encima. Así quedará terminado tu plato sabroso, nutritivo, saludable y sin harinas, para degustar sin culpa ¿Te lo vas a perder?

Fuente: http://www.lr21.com.uy, http://comidaquesana.com